En 2023 se elaboraron 5,24 millones de toneladas de cobre en el mercado local, lo que constituye una caída de 1,4% versus el ejercicio previo, y el volumen más bajo desde 2003. En el caso de Codelco, el descenso en la producción fue de 8,3%.
By Maximiliano Villena
La baja en la producción de cobre por parte de Codelco, a la espera de la puesta en marcha de sus proyectos estructurales, terminó por impactar en el total a nivel nacional. Según los datos entregados por Cochilco este lunes, la elaboración del metal rojo en el país llegó a su menor nivel en 20 años.
Así, la producción de cobre en Chile cerró en 2023 con un total de 5,24 millones de toneladas, una caída de 1,4% respecto de la producción del ejercicio previo. Con estos datos, el total de cobre elaborado en el país por la estatal y las compañías privadas durante el año pasado fue la menor desde 2003, cuando la producción cerró en 4,92 millones de toneladas.
En el caso de Codelco, su producción llegó a 1,42 millones de toneladas, lo que implica un descenso interanual de 8,3%, siendo el menor registro desde que Cochilco lleva estas estadísticas (2003). La cifra se explica por el retroceso de 4,5% en la producción de cobre de las minas Chuquicamata, Radomiro Tomic y Ministro Hales, que alcanzó a las 689,3 mil toneladas. Por su parte, la producción de El Teniente pasó de 405,4 mil toneladas a 351,9 mil, una caída de 13,2% año contra año.
Daniela Desormeaux, directora de estudios de Vantaz Group, sostiene sobre la estatal que “la menor producción se asocia fundamentalmente a dos causas: por un lado, temas estructurales relacionados a los yacimientos, como mayor dureza del mineral, lo que complejiza el procesamiento, y también en algunos casos menores leyes del mineral, lo que significa que hay que movilizar más mineral para producir lo mismo que antes, elevando con ello los costos. Y, en segundo lugar, temas operacionales, como retrasos en la ejecución de proyectos y problemas con la continuidad de la producción”.
Al respecto, apunta que “tanto los temas estructurales como operacionales redundan en mayores costos operacionales, por lo que una menor escala de producción implica un mayor costo por tonelada. Esto hace que la situación sea más compleja, en especial en un escenario en que los precios del cobre también fueron menores al año previo”.
Según Andrés González, jefe del área minera de Plusmining, “disgregando a nivel de empresas, vemos que Codelco explica más del 100% de esta caída, disminuyendo su producción en 121 mil toneladas versus el mismo periodo. Otras operaciones como Los Bronces de Anglo American, Sierra Gorda de KGHM y Cerro Colorado de BHP, también contribuyeron a la baja total, aunque en niveles mucho menores”.
Añade que “si descontamos la participación de 20% de Codelco en Anglo American Sur y su 49% en El Abra, la producción de Codelco llegó a 1,32 millones de toneladas. Para graficar la gravedad de la caída, esta es la producción de cobre propio de Codelco más baja desde 1998″.
La menor producción de Codelco, y su efecto sobre sus ingresos y niveles de endeudamiento, ha presionado una baja en su clasificación crediticia. En octubre de 2023, Moody’s redujo la nota de la compañía desde “A3″ a “Baa1″, mientras que en noviembre Standard & Poor´s la recortó desde “A” a “BBB+”, a la vez que Fitch Rating la bajó a BBB desde A-. Ante estas acciones, en noviembre pasado el presidente de Codelco, Máximo Pacheco, sostuvo que este “es un negocio a largo plazo. Nada de lo que estamos haciendo hoy, va a cambiar los resultados de la compañía mañana. Son ciclos muy largos (…) La empresas de rating tienen derecho a tener sus propias preocupaciones, sus propias evaluaciones, y nosotros tenemos que hacernos cargo de esa situación de pérdida de producción que es lo que a ellos más les preocupa”.
“Durante 2023 enfrentaron condiciones climáticas adversas en El Teniente y Andina, junto con el estallido de roca de El Teniente a mediados del año, que parcialmente afectó la producción. Con todo, sin duda que el factor central es que Codelco ha tenido problemas y atrasos para el desarrollo de sus llamados proyectos estructurales. Como el objetivo de estos proyectos es principalmente mantener la producción, los atrasos terminan suponiendo un golpe a la producción que ya sentimos”, agrega González.
En el caso de la minería privada de cobre, las cifras en general se mostraron al alza. Para el caso de Escondida, la mayor operación del país, la producción se incrementó 4,5%, hasta los 1,1 millones de toneladas, mientras que Collahuasi llegó a 573,2 mil toneladas, un subida mínima de 0,4%. Pero Los Pelambres registró un fuerte incremento de 9,3%, hasta las 310,6 mil toneladas, mientras que Anglo American Sur se contrajo hasta las 255 mil toneladas, una baja de 18% año contra año. En el caso de esta compañía, es el menor volumen de que tenga registro Cochilco (2003).
Hacia adelante, Desormeaux señala que “nuevos proyectos que están entrando o están por entrar en operación deberían aportar. Por parte de Codelco, el desafío es seguir adelante con sus proyectos estructurales que son fundamentales para que la compañía pueda seguir produciendo”.
Source: La Tercera