Las razones de las firmas asiáticas para desestimar los proyectos que permitirían acerca datos de litio en el país
“No nos vamos a limitar solamente a la extracción del mineral no metálico, sino que además vamos a crear cadenas de valor y hacer transferencia de conocimiento”, dijo el presidente Gabriel Boric en octubre de 2023, cuando anunció con bombos y platillos en Beijing, China, que una empresa de ese país invertiría MUS$233 en Mejillones para producir codos de litio. El gobierno de izquierda daba pasos certeros en un cambio de modelo: no sólo era el comienzo del fin del neoliberalismo, sino que el Estado lideraba el sueño de caminar hacia la industrialización de ese mineral en el país, dejando atrás el modelo extractivista, para avanzar hacia la fabricación de baterías Made in Chile.
“Esto es un anuncio muy importante porque da cuenta de un avance concreto en nuestra Estrategia Nacional del Litio, que no sólo busca aumentar la capacidad productiva de nuestro país, sino también lograr un mayor valor agregado”, agregó entonces el Ministro de Economía, Nicolás Grau.
Después de 19 meses, un balde de agua fría cayó en este anuncio: el DF dio a conocer que la empresa antes mencionada, Yongqing Technology, y otra que había sido seleccionada para crear una planta de carbonato de litio por MUS$290, BYD, desistieron de los proyectos.
BYD fue la primera en ser seleccionada, en abril de 2023. A esta le siguió Yongqing. La idea de Corfo era que ambas recibieron hasta 11.244 t anuales de carbonato de litio de grado batería, producidas por SQM, a precio preferente, con el compromiso de avanzar en la cadena de valor en territorio nacional, generando además más de 1000 empleos.
Ejecutivos de ambas firmas chinas, y expertos en la industria de litio, aseguran que los contratos ofrecidos por Corfo no tenían mucho sentido económico, a lo que se sumó una serie de trabas burocráticas.
Las razones: burocracia, permisos y precios
“Producir caos en Chile hoy no tiene lógica económica. Primero, construir una planta de acá todos en China requiere 1/3 del capital de lo que se necesitan en Chile, y con permisos que allá se demoran pocos meses, y acá pueden ser años. Las otras materias primas, principalmente fosfato de hierro -que en términos de volumen es tres veces el volumen de litio-, se deben traer de China para luego volver a llevar el cato de vuelta China. El interés inicial en 2000 22:02 1023 existió debido a la escasez coyuntural de litio. Hoy, donde los precios de litio más bajos están en China se justifica menos aún”, explica el experto en la industria de litio y socio fundador de iLiMarkets, Daniel Jiménez.
En noviembre de 2022, el precio de litio alcanzó un peak histórico cercano a los US$80 por tonelada, pero luego comenzó a bajar a medida que se desarrollaban nuevos proyectos de producción. Sin embargo, el precio no fue el único factor que influyó en la decisión de las empresas, cuentan ejecutivos que, debido a la sensibilidad de las negociaciones, piden hablar en Off The récord.
“Tratamos de renegociar estos términos con Corfo, de explicarles que eran irracionales. Les dijimos que, con la caída de precios, este tipo de contrato no tenía sentido. Si el precio se fijaba como promedio de los últimos seis meses, y luego bajaba, no le convenía a la empresa. Ese precio preferente dejaba de serlo, y resultaba más barato comprar el litio directamente en China. Pero Corfo no quiso cambiar la fórmula”, critica un ejecutivo de una de las compañías chinas.
También se supo que hubo problemas con los terrenos donde se instalarían las plantas. El año pasado, BYD se quejó públicamente de la lentitud en el proceso para definir el lugar de su planta de todos. En mayo, el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente, respondió a las críticas diciendo que “si para el año 2025 no estaba materializada la inversión, entonces se quitaba la calidad de productores especializado y entraba el tercero en la lista de espera” para acceder al litio a precio preferente.
“El asunto es que cuando haces una planta de acá todo litio, esa es sólo la primera fase de un parque industrial mayor, porque una planta aislada no es viable económicamente sino desarrollas toda la cadena del litio. Y para eso necesitábamos acceso a solares y a terrenos más amplios aledaños. Eso Bienes Nacionales nunca lo entendió. No nos quisieron entregar más de 50 ha”, señala otro ejecutivo chino.
Reacciones de los expertos y perspectivas futuras
“Es lamentable que no se haya concretado la inversión. En este caso, las señales de qué no se materializaría se venían observando desde hace tiempo. Esta información simplemente confirma lo que se preveía”, dice Juan Carlos Guajardo, directores ejecutivo de la consultora minera Plusmining.
“Aparentemente, tres factores principales han influido en esta situación: las perspectivas menos favorables del mercado de litio, los problemas relacionados con la permisología, y la incertidumbre respecto al abastecimiento en condiciones preferentes después de 2030, año en que expira el actual contrato entre Corfo y SQM”, agrega al experto.
Tanto Guajardo como Jiménez se muestran sorprendidos de qué estas adjudicaciones a BYD y Yongqing no hayan estado respaldadas por boletas de garantía. Esto permitió que ambas empresas desistieran de los proyectos sin mayores consecuencias.
Queda por ver, eso sí, que ocurrirá con el nuevo concurso de Corfo para encontrar un productor especializado que acceda a una cuota de litio de Albemarle. El proceso se abrió el 30 de abril de este año y se extenderá hasta el 25 de septiembre.
Al cierre de esta edición, ni Corfo ni el ministerio de economía respondieron a nuestras consultas. El Ministro de Hacienda en tanto, comentó que “esta es una oportunidad que se pierde más que nada por los inversionistas, más que por Chile, porque vamos a continuar con esta política de buscar desarrollar las cadenas de valor del litio”.
Fuente: La Segunda