El acuerdo alcanzado, China se compromete a suministrar todos los minerales de tierras raras necesarios, así como imanes completos, al mercado estadounidense.
“Las implicaciones para otros países productores de tierras raras son que si bien se logra mayor previsibilidad de corto plazo al reducirse el riesgo de escasez global (…) mantiene la visión de muchos países y empresas de que la dependencia es geopolíticamente riesgosa”, remarca Juan Carlos Guajardo, director de Plusmining.
En su opinión, el acuerdo otorga un alivio temporal a la oferta, pero no disipa los riesgos estructurales que hacen atractiva la producción en otros países. Se “mantiene viva la necesidad de desarrollar fuentes alternativas. En ese Marco, Chile podría beneficiarse si logras estructurar proyectos competitivos y sustentables. Chile cuenta con potencial geológico”.
Pero Álvaro Merino, director ejecutivo de Núcleo Minero, precisa que el escaso desarrollo de la producción de este elemento en el país no se debe factores externos, sino que la burocracia interna y a presiones de grupos ambientalistas que han impedido que se manifieste con fuerza el potencial que tiene Chile en esta materia.
“En efecto, el proyecto Aclara, en la localidad de Penco, que considera una inversión de US$130 millones y una producción en régimen de 1700 toneladas (…) lleva años de tramitación y aún no cuenta con los permisos para operar”, dice Merino.
“El país requiere en forma urgente agilizar el otorgamiento de permisos (…) Si hacemos bien esta tarea, el país podrá aprovechar las enormes oportunidades que ofrece el crecimiento del mercado de tierras raras”, agrego.
Fuente: El Mercurio