Tras 10 años, hoy superó los US$4 la libra.
Los grandes proyectos que podrían aprovechar la bonanza. La gran y mediana minería no se acelera y aún ve con moderación este periodo.
Buenas noticias desde la Bolsa de Metales de Londres. El precio del cobre llegó a los US$ 4,113 la libra, tras subir un 3% respecto al viernes. Según la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), es el precio más alto para el metal rojo desde el 1 de septiembre de 2011. El rally es motivo de celebración no sólo entre los privados que obtienen mayores ganancias. Según explica el presidente de Sonami, Diego Hernández, “por cada centavo de dólar promedio anual que aumenta la cotización del cobre, Chile incrementa sus ingresos en US$125 millones por exportaciones y el fisco en US$60 millones por concepto de excedentes de Codelco y tributación de la minería privada”.
El presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, sostiene que “la gran minería del país está aprovechando los actuales precios del cobre con una producción prácticamente en niveles pre pandemia, gracias al tremendo esfuerzo que se hizo durante el año 2020 para continuar operando, no obstante las restricciones que ha impuesto la pandemia”. Aunque esto no significa que las grandes mineras cambien sus planes de explotación por el momento. En BHP comentaron que sus planes son de largo plazo, por tanto no se modifican por una circunstancia puntual de mercado, como la posibilidad de explotar sectores con mayor ley de mineral.
Los que sí cambian son otros sectores de la minería, como los pequeños y los proveedores, pues tienen más flexibilidad para adecuarse rápidamente a este mejor escenario. William Díaz, ex vicepresidente ejecutivo de Enami en el periodo del súper ciclo explica que en estas coyunturas, los más pequeños reactivan sus faenas con rapidez, lo mismo ocurre con los proyectos de exploración, impactando a los proveedores y los puestos de trabajo. “Por ejemplo se activan los sondajes y los precios igual. En un periodo normal un sondaje puede tener un costo de US$10 dólares el metro y en un periodo de bonanza podría llegar a US$100. También hay un fenómeno laboral, donde mucha mano de obra deja la agricultura”, sostiene.
Los proyectos que vienen
Pero hay iniciativas nuevas que podrían aprovechar esta bonanza. Según el director de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco, Jorge Cantallopts, actualmente están en proceso de entrada en operación este año proyectos como “Desembotellamiento Concentradora Mantos Blancos, de Mantos Copper (US$ 219 millones), Traspaso Mina-Planta de Codelco División Andina (US$ 1.480 millones) que sólo por el hecho de estar programados para este año, pudiesen ver un aprovechamiento de esta alza de precios”.
El experto agrega que después se observan proyectos que están programados para 2022 o para 2023 que pudiesen buscar opciones para adelantar sus cronogramas y tratar de aprovechar el escenario actual, como la ampliación marginal Los Pelambres Fase I o proyecto INCO (US$1.300 millones), Spence Growth Option de BHP (US$ 3.260 millones), Desarrollo Mantoverde de Mantos Copper (US$ 847 millones), el proyecto de mediana minería Diego de Almagro de Minera Sierra Norte (US$ 597 millones) o QB2 de Teck (US$ 4.739 millones).
Pero eso no es todo. También el sector minero tiene proyectos en búsqueda de permisos ambientales. Eso sí, estos podrían ver la luz en un horizonte más largo. El ministro de Minería, Juan Carlos Jobet, comenta que a enero se levantaron 15 proyectos nuevos por más de USS$19 mil millones, que deben presentarse a evaluación ambiental: “Son ampliaciones de faenas, inversión en infraestructura y otros greenfield”.
De ellos, los dos principales son el “Desarrollo de Infraestructura y Mejoramiento de Capacidad Productiva de Collahuasi”, que involucra una inversión de US$3.200 millones y Los Bronces Integrado, de Anglo American, por US$3.000 millones.
Mirada experta
De acuerdo a los especialistas, el alza en los precios debe ser tomado con cautela, dado lo complejo que es levantar grandes iniciativas.
“La intuición indicaría que estos altos Precios inmediatamente podrían generar una ola de inversión, pero la minería no funciona de una manera tan automática. En ese sentido, Si uno mira el portafolio de proyectos, la mayoría son de expansiones o proyectos brownfields, los que, de cierta manera, es más fácil llevar estos que los proyectos nuevos o greenfields. Chile tiene pocos proyectos nuevos a gran escala”, comenta el director ejecutivo de Plusmining, Juan Carlos Guajardo.
En la misma línea, el profesor de Ingeniería en Minería de la UC Gustavo Lagos dice que las reactivaciones de iniciativas suspendidas durante la pandemia podrían verse recién en un plazo de dos años.
“Esto va a pasar de todas maneras, porque el precio se va a mantener por lo menos dos años, por lo que habrán créditos, subirán las acciones, los inversionistas estarán más dispuestos a inyectar recursos. Veremos un aumento en la producción de cobre, en el que pequeñas empresas que habían cerrado y algunas operaciones caras que no eran rentables con bajos precios, volverán a producir”, comenta el académico.
Fuente: La Segunda